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¿Qué información buscas cuando planificas tu viaje? Suponemos que será algo como dónde vas a quedarte, qué vas a visitar, cuánto tiempo estar, qué clima va a hacer, etc. Pero además de todo esto, de las veces que has viajado, ¿alguna vez te has informado sobre el tipo de impacto que tus vacaciones pueden llegar a tener en la comunidad local, el medio ambiente o temas como el calentamiento global? ¿Has pensado si estabas haciendo turismo sostenible?
Aunque muchos de nosotros tenemos buenas intenciones en el momento de viajar, somos pocos los que en realidad nos informamos al respecto. Sin embargo, tal vez este sea el momento perfecto para formarnos como turistas responsables y que así, una vez podamos volver a viajar, lo hagamos de la mejor forma posible.
En Howlanders, apostamos por un turismo sostenible y por eso, vamos a darte algunas recomendaciones que podrás tener en cuenta en tu próximo viaje, además de explicarte lo que es un turista responsable y qué es el turismo sostenible.
¿Cómo afectó el Covid-19 al planeta?
Hace unos meses todos podíamos conseguir vuelos baratos a cualquier lugar del mundo y con la frecuencia que quisiéramos. Era tan fácil como escoger cualquier lugar del mapa, e irte. Así, sin pensarlo demasiado. Sin embargo, con la situación actual del Covid-19, los vuelos internacionales disminuyeron a mucho menos de la mitad y con ello, también lo hizo la contaminación.
Aunque por ejemplo, algunas aerolíneas buscan alternativas para compensar la huella de CO2 que deja cada pasajero, no es suficiente. De hecho, es impactante ver cómo los mapas que enseñan algunos de los puntos que suelen estar más contaminados, ahora se muestran completamente distintos en comparación al año pasado.
Esta situación le ha dado un respiro al planeta y hoy en día no resulta tan fácil irse a cualquier lugar solo porque sí. Los controles impuestos en los aeropuertos son más estrictos y parece mejor pensarlo dos veces aunque las ganas de viajar sean las mismas.
Turismo responsable vs. Turismo sostenible
El turismo responsable es aquel que depende de ti. Al practicarlo, eres tú quien, dentro de todas las opciones, ha decidido optar por aquellas que generen un menor impacto en el entorno.
El turismo responsable suele confundirse con el turismo sostenible y aunque no son lo mismo, se complementan de maravilla. El turismo sostenible depende sobre todo del destino y anfitrión, quien limita el impacto en las comunidades locales y el entorno natural que las rodea, que impulsa la prosperidad económica creando trabajos y mejorando la cohesión social. Un turista responsable es aquel que se decide por un destino y anfitrión sostenible.
Consejos para ser un turista responsable
¡Infórmate!
Lo primero que debes hacer para ser un turista responsable es informarte. ¡Si has llegado hasta aquí vas por muy buen camino!
En cuanto sepas a dónde quieres viajar, intenta investigar un poco más sobre el destino no solo para viajar cómodamente si no para saber si lo estas haciendo sin perjudicar a nadie ni a nada. ¡Es muy importante que seas consciente del impacto que generas!
Cuanto más conozcamos la cultura y las tradiciones del lugar, más podemos aprovechar el viaje y más fácil será comprender y respetar la forma de vida y costumbres de la población local.
Usa medios de transporte más sostenibles
Entendemos que cuando viajas sueles buscar lo más económico posible, vamos, a todos nos gusta que nos rinda el dinero… Sin embargo, ten en cuenta que viajar en avión contribuye a un gran porcentaje de las emisiones de CO2, por lo que si puedes evitarlo, ¡mejor!
Para viajar largas distancias una muy buena opción es el tren porque contamina mucho menos y te aseguramos que se disfruta mucho más al poder apreciar las vistas de cerca. Un ejemplo es el tren de las Nubes que une Argentina y Chile, uno de los recorridos en tren más altos del mundo.
Utiliza el transporte público o la bicicleta
Si estás agotado de andar en la ciudad, asegúrate de utilizar el transporte público o incluso mejor, ¡andar en bicicleta!
Si te estás alojando en un hostal o en un hotel, seguramente puedan informarte sobre cómo funciona el transporte público o dónde alquilar una bici. De este modo no sólo te ahorrarás un poco de energía si no que podrás ver cómo es el día a día de los lugareños.
Consume localmente
Olvídate de los típicos souvenirs: imanes, camisetas, vasos de chupito (😉), etc. Probablemente ni siquiera están fabricados en ese lugar, por lo que lo mejor es comprar tus recuerdos en tiendas locales o establecimientos de artesanías para que el dinero que gastes revierta en la comunidad local. Haciendo esto podrás acercarte más a las personas que viven allí e incluso preguntarles sobre el origen del producto o el proceso de elaboración.
¡Muy importante! No hagas demasiado regateo al comprar. Aunque en algunas culturas es tradicional, hay que saber la importancia que tienen esos ingresos para el artesano o el comerciante local. Puede que sea incluso su única actividad económica.
Lo que para ti es muy poco dinero, para ellos puede ser mucho. Tampoco compres productos hechos de conchas, coral y otros animales o imitaciones ilegales.
También puedes contratar un guía local y experimentado (que sea legal). Es una forma de apoyar la economía local y además será la mejor persona para enseñarte y aconsejarte.
Está claro que aquí también entra el probar la comida local, ¿no? No vaya a ser que visites un nuevo destino y termines comiendo en un McDonalds. Por favor, no. Parte de visitar un destino, en este caso, ¡enseñar al paladar a los sabores más exóticos de Latinoamérica!
Viaja ligero
Al hacer la maleta, lo mejor será llevar poco equipaje y meter solo lo imprescindible. También hay lugares, como en el W Trek de Torres del Paine, donde existen «guarderías» donde dejar tu equipaje en las rutas diarias. Aún así, te damos unas recomendaciones:
- Si llevas un neceser transparente no necesitarás las bolsas de plástico que te dan en el aeropuerto, para pasar líquidos y geles por el control de seguridad.
- Si viajas en coche, cuanto más lo cargues, más gasolina tendrás que utilizar y mayores serán tus emisiones de CO2.
- Si piensas pasar tiempo en la naturaleza, lo mejor será llevar ropa que sea fácil de lavar y que se seque rápido, además de ser ropa fabricada con materiales ligeros que no dañen el medio ambiente.
- También puedes buscar utensilios alternativos al plástico o al metal, como cubiertos y platos de bambú.
No te lleves nada de la naturaleza
Parece obvio decir que no debes llevarte los pequeños restos que encuentres en la excursión a Machu Picchu, por ejemplo. O que no es necesario llevar un souvenir hecho con materiales conseguidos gracias (o como resultado de) a la caza ilegal como por ejemplo el marfil o ciertos tipos de pieles de animales.
Pero lamentablemente pasa así que si quieres ser un turista responsable debes dejar tanto a estos espacios como a la naturaleza, en paz. Evita comprar cosas que deberían permanecer donde están y no acompañarte a casa dentro de tu mochila.
Elige un tour operador ético
Si prefieres visitar un destino turístico con la ayuda de un tour operador que pueda guiarte, asegúrate de que sea un tour operador ético.
En muchos casos los tour operadores solo hacen caso a lo que los turistas quieren pero no a lo que la comunidad necesita, así que pregunta o revisa bien las opiniones de otros viajeros para asegurarte de que una vez visites el destino que tienes pensado, tu visita no tenga ningún impacto negativo. La agencia de viajes debe asegurar que tu visita aporte algún beneficio a la comunidad y desarrollo local.
Comparte tu experiencia
Una vez hayas finalizado tu viaje, asegúrate de compartir tu experiencia como hizo Esther en su viaje al Salar de Uyuni. Esta información ayudará a futuros viajeros a saber qué agencias de viaje contratar, dónde comprar, comer u otros consejos que seguramente quieras dar después de visitar el destino.
Con esta información podrás ayudar a que se dé un crecimiento turístico más sostenible, mientras inspiras a otros viajeros.
Si tienes algún consejo de algún destino que quieras compartir aquí, ¡no dudes en comentarlo!