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Los pueblos fantasma que encontrarás en la Ruta 66

Carretera abandonada pueblos fantasma ruta 66

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Parece ser que la palabra fantasma tiene cierto magnetismo, sabemos que estás aquí por ella, ¡no nos engañas! Antes que nada, ¿qué son los pueblos fantasma de la Ruta 66? Bien, la Ruta 66 cruza EEUU de oeste a este, pero con la creación de la Red de Autopistas Interestatales la Ruta 66 perdió su importancia. Sus distintos tramos fueron sustituidos por autopistas, dejando abandonados algunos de los pueblos de su recorrido.

Lo cierto, es que recorrer los pueblos fantasma de la Ruta 66 es una experiencia muy recomendable porque es viajar a través del tiempo. Sus cafés abandonados y sus gasolineras en desuso son un gran atractivo e imaginar cómo fueron en el pasado es todavía mejor. ¡No solo ronda el misterio en el área 51!

Dicho esto te traemos 12 pueblos fantasma de la Ruta 66 que no te querrás perder:

Calico, California

Calico fue fundado en 1881 como una ciudad minera de plata y en 2005 fue declarada por Arnold Schwarzenegger, entonces gobernador, como La Ciudad Fantasma de la Fiebre de la Plata. Actualmente es un parque estatal llamado Pueblo Fantasma de Calico, todos sus edificios menos cinco fueron restaurados en 1950. Hoy en día es una atracción turística, vaya.

Estados Unidos es el país de los Parques Nacionales, o eso parece porque muy cerquita de Calico (a 3 horitas) está uno de los mejores: el Valle de la Muerte de California, conocido por ser el lugar más caluroso del mundo. Ya que estás por ahí, compruébalo, ¿no?

Newberry Springs, California

¡Luces, cámara y acción! En Newberry Springs está el Bagdad Café que sirvió de inspiración para una novela y película basada en Bagdad, el rincón más seco (si ves la película entenderás el porqué de este adjetivo) de Estados Unidos.

¿Por qué Bagdad Café no está en Bagdad? Porque estaba derruido, y aprovecharon las instalaciones del Sidewinder Café en Newberry Springs y le cambiaron el nombre, así de fácil. Bagdad no tendrá café, pero tiene cementerio y visitar un cementerio en un pueblo fantasma está guay.

Amboy, California

El pueblo de Amboy es conocido por el cartel del Roy’s Motel & Cafe. Aunque hace años era restaurante, motel y gasolinera, hoy solo funciona esta última parte. ¡Es difícil imaginarse que Amboy tuviese hasta un aeropuerto! En 2003 su población era de 7 personas y ese mismo año se puso a la venta en Ebay por el módico precio de 1.9 millones de dólares, pero no se vendió.

Oatman, California

Su población actual es de 150 personas y un poltergeist: Oatie the Ghost. ¡Sí, sí, un poltergeist! Se cree que es el espíritu de William Ray Flour, un minero irlandés que murió detrás del hotel Oatman. No te preocupes que es inofensivo y te dejará disfrutar de las Black Mountains que rodean este antiguo campamento minero.

Chloride, Arizona

Este pequeño pueblo lleva sobreviviendo al duro clima del desierto desde 1860. Cuando el auge de la minería llegó a su fin, Chloride se convirtió prácticamente en un pueblo fantasma. Hoy en día, es hogar de unos 250 modern-day cowboys.

Hackberry, Arizona

El pueblo nació como un asentamiento minero en 1875. El boom económico de la minería duró hasta que se agotó el mineral a mediados de la década de 1910. En 1919 quedaba una familia, los Grigg. Cuando la 66 se popularizó aparecieron moteles y gasolineras, que cerraron cuando la Interestatal 40 abrió a 25 kilómetros al norte en los años 70. En 2010 Hackberry tenía 68 habitantes.

Seligman Arizona

Recorriendo los pueblos fantasma de la Ruta 66 hay tiempo para todo, hasta de cortarse el pelo. Pensarás que no es necesario en un viaje tan especial parar a cortarse el pelo, pero es que en Seligman Ángel Delgadillo sigue ejerciendo de barbero, ¡a los 93 años!

Y no te mentíamos cuando te decíamos lo de los Parques Nacionales de Estados Unidos. A menos de 2 horas puedes visitar el Gran Cañón, el mismísimo Gran Cañón del que tanto has oído hablar.

Golden, Nuevo México

En el censo de 2010​ había 37 personas residiendo en Golden. Si siguen puedes ir a hacerles una visita, o pasar a comprar algún objeto hecho a mano por los nativos en la tienda Henderson Store si quieres un souvenir.

Madrid, Nuevo México

Este pueblo fantasma no es tan fantasma. Se recuperó y ahora cuenta aproximadamente con 40 negocios, entre los que destacan galerías de arte. En 2010 contaba con 204 habitantes, ¡por los pelos entra en nuestra lista de pueblos fantasma de la Ruta 66!

Texola, Oklahoma

Su nombre es una mezcla entre Texas y Oklahoma, ¡qué curioso! Actualmente está habitado por menos de 10 personas, pero el bar sigue en funcionamiento. Lo bueno es que no tendrán que llamar para reservar. La estación de servicio, Magnolia Service Station, está restaurada, así que si pasas por Texola puedes poner gasolina al coche y tomar un aperitivo, ¡no hace falta más!

Erick, Oklahoma

Hay veces que más que el lugar en sí, es su esencia la que le hace especial. Esto es lo que sucede en Erick que, siendo un pueblo fantasma más de la Ruta 66, sigue vivo gracias a Harley Russell. Russell se considera un músico mediocre y vive de las propinas de la gente. Verlo en su tienda en la que no se vende nada y cantando sin técnica alguna es la atracción de Erick y es todo un placer.

Red Oak II, Missouri

No se puede hablar de Red Oak sin nombrar a Lowell Davis. Davis fue ilustrador, pero su mayor obra de arte fue Red Oak II. Sí, él fundó el pueblo cerca de Carthage como homenaje a su propio pueblo Red Oak. Con sus propias manos restauró sus viejas casas y ha conseguido que los turistas se sientan como en el siglo pasado. ¡Qué artista!

Los pueblos fantasma de la Ruta 66 son muchos, pero hemos elegido 12 que creemos que seguro te van a gustar. Lo mejor es conocer su historia y si encima lo haces a través de la voz de sus pocos habitantes, ¡es un extra! ¿Te animas a recorrer los pueblos fantasma de la Ruta 66 al completo?

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