Los 5 animales del Amazonas a descubrir

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Si piensas en el Amazonas, seguro que te viene a la mente una extensa selva tropical llena de vida, pero sobretodo, de misterios. Y es que ésta región central ubicada en América del Sur es conocida por ser el pulmón del mundo y por poseer inmensas riquezas naturales tanto en flora como sobretodo en fauna única en el mundo. En el post de hoy te hablamos de los 5 animales del Amazonas que descubrirás si te pierdes por la Selva, y no todos serán especialmente amigables:

El delfín rosa

Este delfín característico del Amazonas es conocido también con el sobrenombre de tonina. La principal peculiaridad de este mamífero es que es, a diferencia del clásico delfín que podemos ver en el mar, el delfín rosa es de agua dulce.

El delfín rosa se caracteriza por tener ojos muy pequeños y una aleta dorsal larga y plana. Estos delfines no se parecen a los delfines comunes de agua salada, pueden llegar a pesar unos 184 kilogramos y a medir unos 2,5 metros. Además, su cabeza es grande en comparación con otras especies de delfines.

Su distintivo color rosa lo adquieren con los años. La boca es puntiaguda como una botella, y aunque es un animal de grandes dimensiones muchos especialistas lo definen como amistoso e investigador. Si haces un viaje a la Selva de Iquitos, la amazonía peruana, es muy probable que te encuentres con alguno de ellos y tal y como nos cuenta nuestro compañero Javier en su experiencia en Iquitos, puede que incluso te los encuentres mientras nadas.

Mono aullador

Uno de los animales del Amazonas más populares es el peludo y ruidoso mono aullador. Un nombre bien puesto y que no engaña al visitante que pueda conocerlo en primer persona ya que dedica gran parte del día en el que está despierto a formar un escándalo que no pasa inadvertido por sus vecinos de la fauna amazónica. Vamos, que se hace notar.

Los aullidos provienen de los machos de la manada, que aunque haya muchos, sólo existe un macho adulto dominante. Una de las razones por la cual este increíble mono aúlla es para avisar a las otras manadas dónde se encuentra ubicado. Seguro que tú también te das cuenta de que está ahí si viajas a la Reserva del Cuyabeno en Ecuador, de verdad que lo de «aullador» se lo ha ganado a pulso.

Sólo comen hojas y gastan tanta energía aullando que son todos unos perezosos llegando a pasar más de 15 horas al día durmiendo.

Caimán

No podía faltar un gran depredador en esta lista: el caimán del Amazonas. Se trata de un bello a la vez que peligroso animal que podemos encontrar en los alrededores y las zonas más húmedas, por lo que si viajas a Puerto Maldonado es posible que te encuetres con alguno.

Con un tamaño de alrededor de 7 metros de largo, estamos ante el reptil depredador más grande de América Latina. Se le puede diferenciar fácilmente del clásico cocodrilo porque su boca es más delgada. Entre sus comidas favoritas están las aves, serpientes y hasta las ranas.

Anaconda

Imagina a una serpiente de un tamaño tan grande que tuviera la capacidad de poder engullir una vaca. Así es la anaconda: una serpiente única y enorme que puedes ver si visitas la Selva de Rurrenabaque, en la amazonía boliviana. No te preocupes, allí tienen todo controlado y no hay peligro.

Originaria de la familia de las boas, su habitad principalmente son los ríos, aunque también se pueden encontrar enrolladas en árboles.

Se alimentan de cualquier animal que puedan digerir de un solo bocado, incluso si es más grande que la misma serpiente. Al comer, se traga la presa entera y no vuelve a comer hasta que no termina de hacer la digestión, en lo cual tarda varias semanas.

Su color característico es verde oscuro con manchas ovaladas color negro. Y respecto a su tamaño… la anaconda más grande que se encontró en el Amazonas medía algo más de 8,5 metros de longitud.

Jaguar

Este bello animal cuyas manchas cautivan a cualquiera, es parte indivisible de la selva tropical de América del Sur. Es el felino más grande ubicado en esta región, y está en peligro de extinción.

El jaguar puede pesar más de 90 kilos. Su cuerpo corto y fuerte lo hace ágil a la hora de cazar a su presa y su color varía entre tonos amarillos pálido y pardo rojizo. Es conocido por ser un animal solitario y nocturno ya que sale a cazar al ponerse el sol.

Como verás, el Amazonas alberga a un montón de animales y solo verlos ya es un espectáculo de la naturaleza. Eso sí, haz siempre caso a los guías cuando visites la selva. Ellos tienen todo controlado y se conocen la selva al dedillo. ¿Qué te han parecido estos animales? ¿Te gustaría verlos o te dan miedo? 😉